Se trata de una carta que el entonces Patriarca de Venecia, el cardenal Albino Luciani, escribió días previos para entrar al Cónclave, “Afortunadamente estoy absolutamente fuera de peligro”, reza el documento.
Dos días después, fue elegido Papa, bajo el nombre de Juan Pablo I. Esta carta iba dirigida a Monseñor Guiseppe Carraro, obispo de Verona en ese tiempo. En esta carta, estaba tan seguro que no sería elegido que le puso, “Tan pronto como sea posible iré a verte” y añadió que, “Del Cónclave y del precónclave, por desgracia, no podré decir nada, llevo el secreto”.