Los jóvenes Ligia Guadalupe Uriarte García y Mario Antonio Zelaya Aparicio, coordinaron un encuentro de varios grupos juveniles de la ciudad de Juticalpa, entre ellos el de la Parroquia de Santa Gertrudis, esto con la finalidad de comenzar con los trabajos pastorales para este año.
Cabe mencionar que a este encuentro asistieron 33 jóvenes de tres grupos y al amparo del lema “El compromiso del joven en la Iglesia”, asumieron la responsabilidad de fortalecer su fe. Este evento se desarrolló en la Iglesia de la colonia Porvenir Norte de la ciudad de Juticalpa, en donde también se dio el espacio para que algunos de los participantes compartieran sus testimonios, asumiendo todos el compromiso de caminar juntos siempre en clave sinodal en el marco de la invitación que ha hecho el Papa Francisco de seguir este camino juntos como Iglesia. Ligia Guadalupe, manifestó que “Las alianzas generan fuerzas. La reunión sirvió para generar ideas para un mejor desarrollo de nuestra Iglesia y sociedad. Todo lo hacemos en aras del beneficio colectivo y dentro de los jóvenes eso es muy significativo, porque así se logra cimentar la fe”.
Compromiso
Ayudar a impulsar a los muchachos y muchachas en sus iniciativas, es un acto con el cual nos convertimos en responsables del desarrollo de sus acciones. En los encuentros de jóvenes, por lo general cuando estos son dentro de grupos eclesiales, siempre hay algo motivante entre ellos que los invita a tomar iniciativas para que los involucren y los tengan en cuenta dentro de los trabajos pastorales y a su vez convertirse en un ente multiplicador para atraer a más servidores para esta zona de la Iglesia hondureña.
Sor Glenda, coordinadora de Pastoral Juvenil de la Catedral Inmaculada Concepción, expresó que “La idea es motivar a estos chicos para iniciar este nuevo año y con esto responder en cada uno de sus grupos a las inquietudes de servicio por los demás dentro de la diócesis”.
Al final de este evento, también se tomaron determinaciones para conocer los trabajos que se harán durante el Año Jubilar Mariano dentro de su diócesis y también contribuir con los cambios que se generarán en la sociedad y con ello ayudar a mejorar el trabajo de cada pastoral en toda la Iglesia olanchana, que urge de líderes juveniles que cambien la mentalidad de los miembros de los diferentes grupos y movimientos.