Al celebrar cada 12 de agosto el Día Internacional de los Jóvenes, es importante poner la mirada en este grupo, que representa el 16% de la población mundial, y que, en Latinoamérica, 39% de ellos viven en condición de pobreza y un tercio del total no tienen acceso a la educación. En el país representan el 36.1% del total de hondureños y la mayoría sufre por educación, salud y empleo. A pesar de estas desalentadoras cifras, siguen siendo la esperanza de la sociedad.
Según Visión Mundial, en el país, antes de la pandemia existían 800 mil “Nini”, para referirse a los jóvenes que ni estudian ni trabajan, con la pandemia esta cifra subió a un millón doscientas mil personas. Ante esta dura realidad, una loable acción está realizando está entidad es la ejecución de un proyecto que genera estudio, capacitación laboral y apoyo para emprender negocios a más de siete mil jóvenes.
La Iglesia Católica también apuesta por la juventud en todo momento y trata de acompañar a los muchachos con muchas propuestas concretas que buscan mejorar la calidad de vida de quienes son el presente de la sociedad.