Cada día se han ido conociendo más avances con respecto a las secuelas o los daños que deja el COVID-19 en la población que sufre o se infectó con el virus. Dentro de los últimos estudios que se han presentado, se ha descubierto que esta enfermedad afecta el sistema cardiovascular. El doctor Jorge Ochoa, cirujano cardiovascular, detalla que el 79 por ciento de los pacientes que sufrieron de coronavirus, ya sea con síntomas o asintomáticos, pueden sufrir daños en las arterias, las venas y directamente en el corazón.
Complicaciones Dentro de los problemas que produce la enfermedad al corazón están: los infartos, arritmias, alteraciones valvulares, taquicardias o bradicardias, así como inflamación del corazón y la formación de coágulos en este órgano.
Otra consecuencia de esta nueva patología, es la afectación directa a la circulación generando el desarrollo de trombosis arterial. Recomendaciones Los más propensos a desarrollar estas condiciones del sistema cardiovascular son las personas con sobrepeso, los diabéticos, los que llevan una vida sedentaria, los que tienen algún historial cardiovascular y los adultos mayores. El doctor Ochoa agrega que “Es difícil que una persona no sufra este tipo de problemas, pero una manera para evitarlos es mantener una alimentación saludable, evitar comidas que producen inflamación, hacer ejercicio, tener mente positiva y seguir con las medidas de bioseguridad”.
7.4 millones de personas mueren cada año por infartos según cifras de la Organización Mundial de la Salud. Y en el caso de los pacientes que sufren un infarto y están infectados por el SARSCoV-2 presentan una mortalidad cinco veces superior a que aquellos pacientes con infarto que no tienen el COVID-19.