Estar presentes en la formación y crecimiento de los jóvenes dentro de la Iglesia, es un paliativo que fortalece el deseo de seguir misionando y llevando a cabo la evangelización, y precisamente, que la juventud se abra a espacios de formación, es lo más importante para enseñarles el amor por el servicio. Es por ello que generar espacios de convivencia, es oportuno para hacer lío, como lo ha pedido el Papa Francisco, y de esta manera poner siempre en movimiento a nuestra Iglesia Católica.
Espacios
El Movimiento Familiar Cristiano (MFC) de la Parroquia Santo Tomás Apóstol de Catacamas, en el departamento de Olancho, se desplazó junto con el Movimiento Familiar Cristiano Juvenil (MFCJ), para realizar la “pesca evangelizadora” y que tuvo lugar en la comunidad de Patuca, en donde “lanzaron las redes” y lograron una respuesta generosa de 48 jóvenes que serán los nuevos evangelizadores de este sector. El templo Nuestra Señora de Suyapa de Patuca, fue el lugar en donde estos jóvenes, mujeres y hombres, recibieron su respectiva bendición en presencia de amigos, familiares y representantes de la Iglesia local. Cabe destacar que la Diócesis de Juticalpa, representada en estos dos movimientos, realiza una labor incansable ya que aparte de la evangelización también impartieron una formación en este sector para tener una mejor coordinación. Asimismo este sector de Patuca sigue siendo semillero de sacerdotes y religiosas que son ejemplo de entrega y servicio para que así los jóvenes sean ente multiplicador y hacer que los obreros de la viña del Señor, cada día puedan aumentar. Los trabajos en grupo ya son habituales, lo mismo que las dinámicas ya que todo esto sirve de motivación al joven para empoderarse de sí mismo y realizar actividades que sean de atracción hacia los demás.