La parroquia Medalla Milagrosa de la colonia Edilberto Solano, sector López Arellano, en San Pedro Sula, fue la sede del “Encuentro de Familias de la zona Medalla Milagrosa”, donde feligreses de las diferentes comunidades parroquiales vivieron una tarde de comunión fraternal. El párroco de esta comunidad padre Luis Carrasco, como anfitrión, dirigió las palabras de bienvenida, expresando que “Es una gran alegría estar reunidos como familia de Dios, una bendición, cada uno de ustedes son un regalo del Creador”. La oración en acción de gracias por todas las familias de esta comunidad, que buscan la conversión para ser mejores personas y mejores cristianos, fue realizada por Domingo Navarro y Dilcia Suyapa Castillo Mejía, miembros activos de la parroquia Nuestra Señora de Fátima.
El tema principal de este evento fue “La familia: encuentro de conversión y amor” y fue impartido por el padre Gustavo Fuentes, quien expresó que “Para que en nuestras familias tengamos un encuentro de conversión y de amor, debemos saber que debe de haber una transformación, que no se trata solamente de tener un modo distinto de pensar a nivel intelectual, sino de la visión del propio modo de actuar a la luz de los principios evangélicos que son: la santidad, justicia, paz, verdad y el amor”.
El presbítero continúo explicando que “este llamado a la conversión lo hace el vivir de la Iglesia y las Sagradas Escrituras desde los profetas hasta el mismo Señor Jesucristo, que nos invita a convertirnos y a creer en el Evangelio para ser testigos de su amor. La Iglesia, a través de los documentos, nos invita a ser diferentes y la familia, viviendo la conversión, se vuelve un encuentro de amor pleno, que se le debe enseñar a los hijos”.
Actividades constantes de unidad
En la actividad que se realiza en el marco de la celebración del Mes de la Familia, estuvieron presentes los hermanos de la Comisión Arquidiocesana de Pastoral familiar y el decano de zona Medalla Milagrosa padre Abrahán Monjarás. Fue una tarde llena de alegría, animación a cargo del coro de la parroquia San Francisco de Asís juegos y comunión familiar que culminó con la Eucaristía.