Identificar, ubicar y capturar a los asesinos de los tres policías y el combate frontal a otros grupos delictivos organizados que operan en Colón, es uno de los principales objetivos de la operación Posmura-Guaimoreto, que anunció el director de la Policía Nacional, comisionado Gustavo Sánchez se ejecuta en la zona, ya que la muerte de los oficiales, responde a una reorganización de las estructuras criminales y de narcotráfico.
Ayer se daba a conocer el deceso de los oficiales Jairo Posadas, Jonathan Ramos y Juan Carlos Murillo, quienes fueron abatidos en Agua Marina, Trujillo. Hasta el cierre de esta edición no se han tenido capturados, afirma el subcomisario Cristian Nolasco, portavoz de la Dirección Policial de Investigaciones, DPI.
Este lamentable hecho, se suma a una gran cantidad de delitos que se cometen en la zona, y que en su mayoría queda en la impunidad, así lo denuncia Hugo Maldonado, defensor de Derechos Humanos, quien añade que esta fue la masacre número 16.
La presidenta ordenó vía Twitter, un estado de excepción para todo el departamento de Colón, por lo que se espera que este denominado “toque de queda” sirva para frenar la violencia en el lugar.