Honduras dio un giro el pasado 28 de noviembre de 2021, cuando una gran mayoría depositó su confianza en la actual presidenta Xiomara Castro, quien ha tenido un gran reto de recuperar el Estado de Derecho, el territorio nacional y la seguridad que se ha perdido ante la penetración del crimen organizado y el narcotráfico.
La presidencia de la República, nunca había sido asumida por una mujer. Han tenido que pasar 200 años desde que se proclamó nuestra independencia.
La catástrofe económica con la que recibió el Estado es histórica, impactando en la vida de la población, ya que se reporta el aumento del 700 por ciento de la deuda externa. La pobreza se incrementó al 47 por ciento, lo que convierte a Honduras en el país más pobre de América Latina, lo que es un factor que propicia la salida de caravanas de miles de personas que buscan oportunidades para sus vidas.
La deuda interna subió de 20 mil millones a 179 millones de lempiras, ósea un 700 por ciento. El saldo de la deuda externa de 37 mil millones a 157 mil millones de dólares, es un 31 por ciento, cifras que evidencian que el Estado no tiene la capacidad para sostener las arcas del país, dejando sin sueldo, por ejemplo, a más de seis mil profesionales de la medicina.
Otro de los problemas que ha recibido el actual Gobierno es la crisis energética, la destrucción de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE), también es una condición que tiene al país en las peores condiciones.
En el marco del bicentenario recién pasado, el compromiso de la primera funcionaria es refundar el país, misión que fue catalogada como imprescindible e irrenunciable, comprometiéndose con el mandato del pueblo manifestado en las urnas.
Dentro de los logros de los primeros meses del presente Gobierno diferentes sectores han resaltado muchos aciertos, de igual manera han cuestionado otros puntos que no se han cumplido luego de ser prometidos y señalados en la campaña electoral.
“Es un Gobierno de transición y que al no tener establecido un programa, el personal idóneo en las secretarías, transita entre aciertos y desaciertos, posiblemente más desaciertos ante los cuestionamientos del nepotismo, el no tener claridad, pero también es importante resaltar las promesas cumplidas como la eliminación de las ZEDE, lo que tiene que ver el empleo por hora, la reducción al precio de los combustibles, tratar de reorganizar el Estado, reformular el presupuesto, pero seguimos en la incertidumbre en estos cien días de la Administración”, manifestó el
analista y economista del Foro Social de la Deuda Externa y Desarrollo de Honduras (FOSDEH), Ismael Zepeda.
Más de un millón de familias que viven en condiciones de pobreza y consumen menos de 150 kilovatios por mes, desde las primeras semanas de la administración Castro, no pagan la factura del consumo de energía.
Por otro lado, se subsidió el costo de los combustibles, aunque lograr una reducción de los precios es complejo, tras la crisis desatada entre Rusia y Ucrania.
De igual manera se resalta el retorno a las aulas de clases de forma presencial, asegurando la matrícula gratis, merienda escolar, vacunas y, en algunos centros educativos, insumos de bioseguridad.
Se ha cumplido con no otorgar más permisos de minas abiertas o explotación de minas, concesiones en la explotación de ríos, cuencas hidrográficas, parques nacionales y bosques nublados.
Otro de los temas que ha generado mucha controversia en los primeros cien días, es la Amnistía Política o Libertad para los presos políticos, así como la protección verdadera de los derechos humanos, que aún falta por trabajar según analistas. “Esperábamos desde las organizaciones de la sociedad civil y de derechos humanos, que la Dirección de Niñez y Adolescencia, recibiera un rango ministerial, en la reorganización estatal esto no fue recibido, de igual manera esperábamos que se diera un aumento a la Secretaría de Derechos Humanos” dijo Carlos Sierra, analista del Centro de Investigación y Promoción de los Derechos Humanos, quien también agrega que “consideramos que estos primeros días no podía entrar todo, porque es un tiempo muy corto para evaluar en materia de garantías sociales”.
De igual manera se ha dado paso a la derogación de la Ley Orgánica de las Zonas de Empleo y Desarrollo Económico, conocida como ZEDE. Así mismo autoridades han asegurado que se esta trabajando en la restructuración del Gobierno ante la forma desordenada que se venía ejecutando, teniendo como bandera la lucha contra la corrupción y el narcotráfico.
OPINIONES
Rodolfo Pastor de Maria y Campos
Secretario de la Presidencia
“Estamos llegando a estos primeros cien días de este Gobierno con logros muy importantes a pesar de la gravedad de la situación que hemos recibido el país, estamos trabajando en la restructuración, ante la forma desordenada y como se venía ejecutando, estamos apagando fuegos para comenzar a construir las bases de lo que debe ser el desarrollo de nuestro país, entre las metas esta la derogación de las ZEDE.
Mons. Ángel Garachana
Presidente Conferencia Episcopal Honduras
“El Gobierno heredo una situación sumamente crítica, una serie de problemas muy radicales y crónicos, no se cambian de la noche a la mañana, se esta empezando y estos meses hay propuestas buenas que se encaminan en la lucha contra la corrupción, tengamos esperanza, colaboremos todos al cambio de la situación, con un plan muy dialogado entre todos, de manera que nuestro pueblo no quede defraudado”.
Oliver Erazo
Abogado
“Estos días han sido sumamente complejos, errados para los hondureños, ante la descomposición social durante doce años, nunca ningún Presidente había tenido un país con el tejido social totalmente descompuesto, pareciendo que sale de una guerra, completamente empobrecido y endeudado”.