Como padre adoptivo de Jesús y esposo de la Virgen María, San José es objeto de celebración en diversas fechas y por diversas circunstancias. Este gran santo de la Iglesia es venerado por múltiples razones, se le atribuyen patronazgos y festividades que conoceremos a continuación:
Padre Adoptivo de Jesús: San José fue confiado con la inmensa responsabilidad y privilegio de ser el esposo de la Virgen María y el protector de la Sagrada Familia. Su cercanía con Jesús y María lo hace un símbolo de paternidad y cuidado divino.
Obrero: San José fue un trabajador dedicado en todos los aspectos de su vida. Como un auténtico obrero, compartió con Jesús la tarea diaria y se convirtió en un modelo de aplicación en el trabajo y el cumplimiento de los deberes laborales.
Patrono de la Buena Muerte: San José es invocado en el momento del tránsito de la vida a la vida eterna. Se le pide que otorgue paz en el alma y la gracia de una vida eterna bienaventurada después de la muerte terrenal.
Patrono de la Iglesia Universal: Dios eligió a San José para proteger y cuidar a su Hijo en la tierra, y también para continuar el legado de la familia divina mediante la fundación, expansión y preservación de la Iglesia. Es considerado como un guardián espiritual de la Iglesia universal.
Patrono de las Familias y Diversos Grupos: San José es venerado como patrono de los padres, mujeres embarazadas, viajeros, inmigrantes, artesanos, ingenieros y trabajadores. Además, es el patrón de diversas naciones, incluyendo a las Américas, Canadá, China, Croacia, México, Corea, Austria, Bélgica, Perú, Filipinas y Vietnam.
San José Dormido: Esta representación de San José, en la que aparece recostado y dormido, inspira una devoción popular donde los fieles escriben sus peticiones o deseos en un papel y lo colocan bajo la imagen del santo, creyendo que él los resolverá en sueños.
San José, con sus diversas facetas y devociones, sigue siendo una figura de inspiración y protección para millones de personas en todo el mundo. Su vida y ejemplo continúan guiando a los fieles en su camino de fe y devoción.