El consumismo muchas veces hace de las suyas y algunos caen en la tentación de atreverse a celebrar fiestas paganas, una de ellas, el Halloween. Detrás de esto existen personas que gastan grandes sumas de dinero en disfraces, dulces y otras cosas para ser participes de esta “fiesta”.
El Padre Rodolfo Varela dice que “Dios nos ha dado el uso de razón, el entendimiento para poder administrar nuestros bienes materiales y estos bienes materiales deben de servir para dignificar al ser humano y como personas miembros de una comunidad estamos llamados a velar por la dignidad de las demás personas. Cuando nosotros hacemos gastos innecesarios dejándonos llevar por el consumismo de la moda de la época, no estamos invirtiendo nuestro dinero en la dignificación del ser humano cuando es lo primero a lo que estamos llamados a ser con estos bienes materiales”.
Consultamos a un experto en Finanzas el licenciado Obed García, quien dice que “Al final del año pueden aparecer algunas fiestas que pueden distraer nuestra atención pero aquí es donde las personas deben mantener una mente equilibrada en donde de verdad se prioricen los gastos importantes y necesarios para el bienestar de la familia por encima de cualquier actividad recreativa que al final a largo plazo generan mas endeudamiento de los hogares o la necesidad de recurrir a otros esquemas de financiamiento que no dan niveles de salud a las familias”.
Asi que ya estamos claros que estas participar en estas fiestas no nos convienen para nada, aparte de ir en contra de los que nos decimos creyentes de Cristo, atentan contra nuestras finanzas.
