Los cambios se anunciaron el pasado martes por la noches, estos pretenden recuperar el impulso perdido en el último año. El motivo del disparo en consumo de contenido audio visual, se asocia a la pandemia y los rivales con altos presupuestos como Apple y Disney aprovecharon la oportunidad para arrebatarle gran parte del publico de sus propios servicios a Netflix.
La decadencia, tras un año de crecimiento cada vez más tardío, ha afectado a otro pilar fundamental de Netflix, sus inversionistas. Después de publicar los decepcionantes resultados, las acciones de la compañía cayeron un 25% más en las operaciones después del cierre. Si está acción continua, Netflix, habrá perdido unos 150.000 millones de dólares, siendo más de la mitad de su valor este año.
Según estudios de Los Gatos, California, se estima que unos 100 millones de hogares acceden al sistema completamente gratis a través de las cuentas de amigos o familiares, incluyendo 30 millones en Estados Unidos y Canadá. “Esos son 100 millones de hogares que ya han decidido ver Netflix”, expresó el director general, Reed Hastings, añadiendo que “simplemente tenemos que cobrar de algún modo por ellos”.
Para hacer un llamado a la acción, a que la gente pague su cuenta, la compañía expandirá un sistema que ha probado en tres países latinoamericanos: Chile, Costa Rica y Perú. Los clientes pueden ampliar su servicio a otro hogar a un mínimo precio. En Costa Rica, por ejemplo, las tarifas de Netflix van de los 9 a los 15 dorales al mes, pero los suscriptores pueden compartir abiertamente la cuenta en otro hogar tan solo por 3 dólares.
Hasta el momento, Netflix, no ha proporcionado más información sobre cómo funcionaría un servicio financiado con publicidad o cuánto costaría; sin embargo, Hulu, ofrece desde hace años esta opción con publicidad.