En la ciudad con más cristianos de Irak, los terroristas del mal llamado ‘Estado Islámico’ practicaban tiro con el cáliz de una iglesia.
Aunque parezca mentira, a día de hoy, existen personas en el mundo que se juegan la vida para ir a misa. Los cristianos que vivían en la llanura de Nínive, Irak, tuvieron que huir de sus casas para no ser asesinados por el autoproclamado ‘Estado Islámico’. Para escapar del terrorismo, Una prueba: un cáliz utilizado para consagrar la sangre de Cristo, prácticamente partido por la mitad por una bala.
Este Cáliz fue encontrado en Qaragosh, la ciudad con mayor número de cristianos del país. Concretamente en una iglesia siro católica milenaria. Cuando nuestros hermanos huyeron, los terroristas usaron los objetos litúrgicos para ensayar su puntería. Una de esas balas atravesó el Cáliz.
Lo que no sabía la persona que disparó, es que se volvería a consagrar en este objeto. Los terroristas no consiguieron el “propósito de eliminar la presencia cristiana de todo Irak. Los cristianos están volviendo a la llanura de Nínive y la Iglesia no tiene constancia de ni uno solo que haya renegado de su fe”.
Ahora, después de casi tres años de la ocupación yihadista, Mosul y las poblaciones de la llanura de Nínive están libres. La realidad a la hora de volver es devastadora: casas quemadas o derrumbadas, altares destrozados, imágenes descabezadas, tumbas profanadas.Miles de familias quieren volver.
Las tres grandes Iglesias de Irak han firmado un acuerdo histórico con Ayuda a la Iglesia Necesitada para trabajar en la reconstrucción de estas poblaciones para que así los cristianos puedan volver. Este proyecto cuenta con el apoyo expreso del Papa Francisco.
La mayoría de estos cristianos se dirigieron a Erbil, capital del Kurdistán iraquí; desplazados han vivido gracias a la caridad de la Iglesia. Ayuda a la Iglesia Necesitada les ha ayudado con 34,5 millones de euros para alojamiento, alimentos y bienes de primera necesidad: Los 15.000 niños han podido estar escolarizados hasta el momento, 13.088 hogares y 363 construcciones de la Iglesia dañados por el ISIS.
La presentadora del programa de televisión Raquel Martín, lo tituló ‘Perseguidos pero no olvidados’ se ha dedicado a buscar historias entre muchas sobre los cristianos perseguidos en el mundo.