El papel de la mujer en la Iglesia y en la sociedad ha sido tema un abordado a lo largo de la historia. Desde los tiempos de Jesús, ellas siempre iban detrás del hombre y no tenían injerencia en los temas importantes. Esto poco a poco se ha erradicado gracias, en gran parte, al ejemplo que dejaron mujeres como María Magdalena, fiel discípula de Jesús y tenaz en sus ideales.
Enriquecedor
Karen Mendoza, miembro de la comunidad de Santa María Magdalena de la parroquia San José Obrero, opina que “Ella es el emblema de las mujeres de fe, ya que constituye para nosotras una lección vida de lo que debe ser nuestro amor a Dios y la firmeza para no abandonarlo en ningún momento”. La enseñanza de la “Apóstol de los Apóstoles”, como la proclama el Papa Francisco, encamina a perseverar en la vida espiritual para encontrarnos con ese Dios vivo, afirma Mendoza.
Impacto
Ahora, tomar el rol de María Magdalena e impregnarlo en la actualidad es el reto, así lo exclama la hermana Guadalupe Martínez, misionera de MARILAM, al opinar que “Ella es un ejemplo claro de construir sinodalidad, porque ante la frialdad e incredulidad de los hermanos llevarles la buena noticia de la vida, que es lo que hace María Magdalena por encargo de Jesús”. Para esta religiosa, Magdalena imprime otro tinte para la las féminas, ya que “es inspiración de la mujer apasionada por Cristo, la hace ir en busca de él y reencontrarse con la experiencia de una nueva vida, que la constituye en misionera”.
Comunidad Santa María Magdalena
A Este grupo de la religiosidad popular de la Arquidiócesis de Tegucigalpa, fue fundado el 21 de enero de 2018 y está conformado por valientes mujeres que animan no solo las procesiones de la parroquia San José Obrero, sino que participan en las diferentes actividades del año litúrgico a ejemplo de su santa patrona.