Al cierre del 2020 un año con muchas irregularidades, entre la emergencia nacional por el patógeno que ha cobrado cientos de vidas en el territorio hondureño y en el mundo, sumándose los recientes huracanes que han dejado más de cuatro millones de compatriotas afectados, diversas parroquias de la Arquidiócesis se han dado cita en los templos como signo de gratitud.
De igual manera se es parte de la jornada de oración convocada por la Iglesia Universal, a pedir por la paz, La encíclica “Laudato sí”, comprueba plenamente la interconexión de toda la realidad creada y destaca la necesidad de escuchar al mismo tiempo el clamor de los necesitados y el de la creación. De esta escucha atenta y constante puede surgir un cuidado eficaz de la tierra, la casa común, y de los pobres, palabras que han ido haciendo eco en las diferentes periferias de la región.
De igual manera las diferentes comunidades de los diversos movimientos que conforman la Iglesia en Honduras, han pedido la presencia del Espíritu Santo, para que el próximo 2021 se aun año lleno de mucha esperanza y más para quienes han perdido a un ser querido, su empleo y hasta sus bienes materiales, quedando en condiciones de extrema pobreza.
Bajo las medidas de bioseguridad, el distanciamiento social, la oración se mantiene con la fe puesta en que Jesús Sacramentado junto a la intercesión de Santa María, las bendiciones del próximo año serán notorias para un pueblo que sufre la indiferencia social, señalaron feligreses quienes fueron parte de dicha jornada.
🙏⛪ En la Parroquia San José Obrero, realizan jornada de oración ante Jesús Sacramentado, en el marco de la jornada de oración por la paz mundial, a la vez dándole gracias por el cierre de un año.
Publicado por Suyapa Medios en Jueves, 31 de diciembre de 2020