Jesús misericordioso se apareció a Santa Faustina Kowalska y afirmándole su presencia en los momentos de tribulación le dijo: «Cuando recen este Tercio junto a los agonizantes, Yo me pondré entre el Padre y el alma agonizante, no como justo Juez, sino como Salvador Misericordioso».
Sor Faustina relata la visión que tuvo en ese momento con la presencia de un ángel y afirma que en la medida que rezaba intensamente a Dios por el mundo, escuchaba palabras internamente que le instruían cómo rezar lo que hoy conocemos como la Coronilla de la Divina Misericordia, una secuencia de oraciones que nos llevan a implorar la misericordia de Dios.
Aquí una guía para rezar la Coronilla de la Divina Misericordia:
Señal de la Cruz: Comienza haciendo la señal de la cruz y diciendo: “En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.”
Credo: Profesa tu fe recitando el Credo de los Apóstoles.
Padre Nuestro: Reza un Padre Nuestro, pidiendo la venida de Su Reino y la realización de la voluntad de Dios en nuestras vidas.
Avemaría: Recita un Avemaría, pidiendo la intercesión de la Virgen María en tu camino de fe.
Cuenta grande del Rosario: En las cuentas grandes del rosario, reza la siguiente oración: “Padre Eterno, te ofrezco el Cuerpo y la Sangre, el Alma y la Divinidad de Tu Amadísimo Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, en expiación de nuestros pecados y los del mundo entero.”
Cuenta pequeña del Rosario: En las cuentas pequeñas del rosario, reza la siguiente oración: “Por Su dolorosa Pasión, ten misericordia de nosotros y del mundo entero.”
Conclusión: Después de completar las cinco decenas, concluye con la siguiente oración: “Santo Dios, Santo Fuerte, Santo Inmortal, ten piedad de nosotros y del mundo entero.”
Oh Sangre y Agua, que brotaste del Corazón de Jesús como una Fuente de Misericordia para nosotros, en ti confío! Tu expiraste, Jesús, pero la fuente de vida brotó inmensamente para las almas, y el océano de Misericordia se abrió por todo el mundo.
Termina con la señal de la cruz y una breve acción de gracias al Señor por Su misericordia.
