La Misa este lunes 27 de Julio fue oficiada por el padre Carlo Magno Núñez rector de la Basílica quien en su homilía manifestó “la primera lectura presenta un buen ejemplo, de las acciones simbólicas con la que los profetas enseñaron tantas cosas a sus hermanos en la fe, en este caso se trata de una franja de fino de la ropa interior pero también es una ropa de cierta ternura que se echa a perder por el agua del rio Éufrates, lo importante de esa ropa ceñida al cuerpo es lo que indica más intimo y personal y también lo que es más delicado en el sentido de fino”.
Podemos relacionar este texto dijo con nosotros mismos, nos sentimos preciosos ante Dios, conocemos lo que es estar pegados, ceñidos a él agarrados de él, descubrimos también lo que es echarse aprender por dejar entrar aguas extrañas del paganismo o de la idolatría, entren a nuestra vida porque así nos echamos a perder.
El evangelio nos presenta esa parábola tan hermosa del grano de mostaza, sin duda viene a nosotros a la mente aquel canto carismático que dice,” si tuvieras fe como un granito de mostaza, le dirías a la montaña que se aparte y la montaña se apartaría, que bueno que una canción poble nuestra mente, nuestro corazón, cuando por supuesto tiene mensaje, no como la música de hoy en día que solo tonteras dice” acotó.
En el caso de esta canción carismática dice que si tuviéramos fe como un granito de mostaza “ese mensaje nos ayuda a enamorarnos del precioso mensaje de Cristo que nos presenta en esta parábola, el mensaje es sencillo, lo más pequeño puede ser grande, sin duda Cristo le llamaba la atención y quería que nos atrajera los contrastes, hay primeros que serán últimos, el que se ensalza será humillado, lo pequeño será lo más grande, lo oculto quedará de manifiesto”.
En todos estos casos, sostuvo “el Señor parece exhortarnos a no fiarnos de las apariencias o quizás más aún a desconfiar de lo que parece y buscar el estilo y el plan de Dios para cada uno de nosotros, buscar el plan de Dios, es de buscarlo también en lo escondido, allí donde no lo conocen o no quieren conocerlo, allí donde lo ocultan por la mentira”.
El sacerdote dijo asumir la lógica del grano de mostaza, es todo un programa de vida, es decir que Dios puede decir sus mejores discursos, por boca de los que juzguemos torpe, inútiles o pocos listos, es amar lo sencillo, lo sobrio lo discreto y desconfiar del ampuloso de los prepotentes, de los deslumbrantes.
“Aquellos que tienen buen discurso pero no hacen nada y mienten, mienten y mienten, es cuidar la fragilidad del embrión, la del agonizante, la del migrante, es adorar con cosas fundamentales y descubrir a Dios en la gente que no cuenta, como lo dice nuestro querido Papa Francisco en lo descartable, descubrir a Dios allí esa es la lógica del grano de mostaza, descubrir a Dios en lo pequeño, en lo que no parece, en aquellos que se le ha robado el derecho a la educación a la salud, porque unos pocos se han enriquecido, con el dinero que les tocaba salud, o los que le tocaba educación y otros beneficios sociales” concluyó.