Optar por el estilo de vida que lo lleva a la vocación de servir, solamente Dios lo puede hacer y se logra a través de un proceso de entrega y abandono en Él. La diócesis de Juticalpa, vivió la Santa Misa de ordenación presbiteral de los diáconos Juan Gabriel Ramírez oriundo de las Parcelas Arriba, Catacamas y de Rony Noé Paz, nacido en San Francisco de la Paz. Esta celebración fue realizada en la catedral Inmaculada Concepción de María y fue presidida por monseñor José Bonello, obispo de esta zona pastoral, además de contar con la presencia del arzobispo de Tegucigalpa, su eminencia Oscar Andrés cardenal Rodríguez y la mayoría del clero de la diocesano.
En la vida todo es un proceso en el cual se van superando valladares que, aunque por muy difíciles que se presentan, la perseverancia ayuda a salir con éxito y lograr alcanzar la meta deseada. Esto fue lo que fortaleció a estos jóvenes. Monseñor Bonello, se mostró muy contento por este acontecimiento y recordó a los ahora ordenados que “Por ti se progresan las creaturas y por ti se consolidan todas las cosas, para formar el pueblo sacerdotal tu dispones con la fuerza del Espíritu Santo. Son colaboradores para anunciar en el mundo entero la obra de salvación”. El cardenal Rodríguez expresó un saludo lleno de cariño para toda la diócesis, y recordó que “Es una alegría ver como esta Iglesia de Olancho ha ido creciendo. Que bello ver vocaciones en estos queridos hermanos sacerdotes, diáconos y muchos seminaristas que poco a poco van caminando”.
El arzobispo de Tegucigalpa manifestó a los jóvenes presente que “quiero animarlos a que presten el oído al llamamiento de Dios, vale la pena servir a nuestro pueblo con el alimento de la fe”. El ahora presbítero Rony Paz, expresó que “Nos vienen pruebas de toda clase, pero no nos desanimamos; seremos perseguidos, pero no abandonados”.
