La pregunta incorrecta es ¿por qué saliste? La acción correcta es recibirla con los brazos abiertos.
Lo incorrecto es decir: “te lo dije”.Lo correcto es decir: “bienvenida a tu casa”.
Lo incorrecto es decir que no se tomó enserio su proceso.
Lo correcto es aceptar que todos tenemos tiempos distintos y desconocemos los suyos.
Lo incorrecto es decir que perdió su tiempo.
Lo correcto es reconocer que se dio la oportunidad de explorar todas sus opciones.
Lo incorrecto es cerrarle todas las demás puertas.
Lo correcto es preocuparse por conocerle y ayudarle en su camino de discernimiento.
Lo incorrecto es pensar que no sabe lo que quiere.
Lo correcto es reconocer que su decisión pudo haber sido tomada porque, precisamente, sabe lo que quiere.Lo incorrecto es pensar que no dio la talla.Lo correcto es reconocer la diversidad de carismas dentro de la Iglesia.
Si la joven decide ingresar a otra comunidad: Lo incorrecto es decir que en esa tampoco durará. Lo correcto es orar por ella para que pueda encontrar su lugar; descubrir la voluntad de Dios.
Basta de estigmatizar a los jóvenes que ingresan a una congregación religiosa y luego deciden salir. Descubrir que es tu vocación, está bien. Descubrir que no es tu vocación, también está bien.
Tomando del apostolado “Mi vocación es el amor”
