La sexualidad puede ser un tema incómodo a tratar, no solo entre padres e hijos, sino a nivel social. ¿Cuántas veces hemos escuchado la frase de muchos adolescentes o madres de familia que iniciaron su vida sexual a temprana edad? Por ejemplo: “Mis padres nunca me dijeron nada” o simplemente “platicar sobre esto era un llamado de atención seguro”.
Es posible que esto sea recurrente en los jóvenes o personas adultas, detalla el Padre José Antonio Chavarría, quien asegura que esto se da más en el área rural, donde aún puede ser prohibido tocar la palabra “sexualidad”. “Hoy que estamos bombardeados de contenido que causa tanto daño. El llamado es para que hablemos a tiempo con los niños y niñas antes que entren a la preadolescencia”, señaló el sacerdote.
Diferenciar
Para la catequista y psicóloga Gladis Ferrera, primero se tiene que saber entender qué es sexualidad y sexo, donde lo primero es enseñarles la forma correcta de llamar a nuestros órganos reproductores, las diferencias entre hombre y mujer y luego, según van pasando los años, ir aumentado la información, como por ejemplo, cómo se conciben los hijos, que pasa sobre las relaciones sexuales a temprana edad. “Lo segundo que se debe de entender es que, al hablar de sexo, se refiere a las prácticas sexuales y qué son.
Es ahí donde los padres deben explicar muy bien y no desinformar” manifestó la experta. La psicóloga Francia Varela, especialista en educación sexual, agrega que a los 4 o cinco años, ya el menor debe irse educando para cuando entre en la etapa donde su cuerpo esté tomando otra forma, y así se tenga un panorama más claro.
Recomendación
El Sacerdote Chavarría, también agrega que “una de las consecuencias mayores de no hablar de este tema, es que los niños buscan a como dé lugar información que no les educa” y expone que “la educación sexual se inicia en casa y los padres deben estar claro que ya no estamos en la época de los miedos u omitir temas y más ahora con tanta tecnología al alcance de la juventud”.
1 Lenguaje
La psicóloga Maribel Plata, expresa que al hablarle de ese tema a los niños (as) y preadolescentes, hay que saber que decimos, usar un lenguaje adecuado sin utilizar sobrenombres o explicar de además, todo debe ser de acuerdo a la edad.
2 Interés
Gladis Ferrera, psicóloga, aconseja que es muy importante no evadir las preguntas, si los infantes tienen interrogantes o curiosidad sobre la sexualidad o sexo, aunque tengamos pena o temor al contestar, jamás dejarlos con la duda.
3 Riesgos
Uno de los mayores riesgos de no hablarles de estos temas es que llegan las violaciones, los embarazos prematuros, el llenarse la mente de morbosidad y que los jóvenes crezcan con dudas que las despejarán mirando televisión o en el Internet.