Las Hijas de María Auxiliadora (FMA) celebran este 5 de agosto de 2022, 150 años desde su fundación en 1872, cuando un grupo de jóvenes consagraron su vida a Dios.
Todo comenzó cuando en 1868 San Juan Bosco, para expresar su profundo agradecimiento a la Madre de Dios por los favores concedidos, construyó una basílica dedicada a María Auxiliadora en Turín y quiso también que esta acción se perpetuara como un “Monumento vivo de Gratitud” fundando así, junto a Santa María Mazarello el Instituto de las Hijas de María Auxiliadora.
San Juan Bosco trabajaba por los jóvenes más desfavorecidos en Valdocco y Santa María Dominga Mazzarello, de manera simultanea, hacía lo mismo pero con las jóvenes de Mornesse. Al encontrarse ambos santos, y bajo los designios de Dios, se creo la congregación religiosa orientada hacia la formación integral de los jóvenes a nivel mundial.
La advocación bajo cual fue instituida la congregación es María Auxiliadora de los Cristianos, quien es considerada la directora, guía y madre de toda sede del Instituto en todo el mundo. Se dice que todo aquel que llega a una casa salesiana, es llevada a ella por María Auxiliadora, quien busca protegernos bajo su manto y ayudarnos.
Sor Chiara Cazzuola, Madre General de las Hijas de María Auxiliadora, en su mensaje en celebración de los 150 años de la congregación, expresa que “celebrar es dar gracias por el camino recorrido, pero también mirar hacia el futuro, hacia el camino que continúa. La llamada sigue siendo a Madre Mazzarello, porque su compromiso educativo la empuja a partir de las necesidades inmediatas, para reavivar la esperanza, orientarnos a los valores, a una misión amplia de la que hoy somos signo y actualización mundial.”
En la actualidad, la congregación femenina tiene presencia en 94 países con proyectos como oratorios, centros juveniles, escuelas, centros de formación profesional, obras y servicios para los jóvenes en situación de riesgo, entre otros. En Honduras, las hermanas cuentan con 7 comunidades a nivel nacional, tanto colegios como internados.
En la fiesta de sus 150 años de fundación, las Hijas de María Auxiliadora, haciendo memoria del camino recorrido y con la mirada hacia el futuro, según lo aprendido de Santa María Dominga Mazzarello y de la mano de María Auxiliadora, continúan con su ardua labor de entregar su vida por la juventud y la salvación de las almas.