La célebre expresión de esta santa mujer, en la realidad que vivimos, solo se puede comprender con los ojos de la fe. Madre Teresa entendía el amor como el olvido de sí mismo, pensar en la felicidad del otro y, si es preciso, entregar la vida por esa causa. Este mensaje debería de proliferar en un mundo donde reina el egoísmo y la “cultura del descarte”.
Realidad
El Presbítero Héctor López, señala que “En nuestro contexto actual, nos mueve mucho el egoísmo y buscar solo el éxito personal por encima incluso del bienestar de las otras personas o sencillamente solo buscar nuestra comodidad. Debemos de entender que el verdadero amor es una entrega total”. El Padre López agregó que “así es como se construye una sociedad justa, así es como se superan las dificultades y los problemas que nos aquejan de manera personal o como sociedad, así es como se vence al mundo”.
Entrega
Muchas de las expresiones que surgen en las redes sociales ante la realidad nacional, exclaman “Como dueles Honduras”, al ver la injusticia, corrupción y desastres que imperan. Es allí que el máster en Teología, Rolando Rodríguez, afirma que “En estas situaciones de dificultad, es cuando más debemos amar. Cristo mismo no renunció a la cruz y gracias a su paso por ella, hemos obtenido la redención.
El Apóstol San Pablo nos enseña en la carta a los Colosenses que sufre y que contempla en su cuerpo las tribulaciones de Cristo, es por ello que la expresión de Agnes Gonxha Bojaxhiu, nombre de pila de Madre Teresa, se debe vivir con mayor compromiso”.
1 Amor
Este no es un mandato, es un don, una realidad que Dios nos hace conocer y experimentar de forma que, como una semilla, pueda germinar también dentro de nosotros y desarrollarse en nuestra vida.
2 Mal
“La existencia del mal no se debe a la falta de poder o de bondad de Dios, al contrario, Él solo permite el mal, porque es suficientemente poderoso y bueno para sacar de este un bien” nos dice Santo Tomas de Aquino.
3 Caridad
Se puede ser amable solo con el fin de obtener una recompensa, sin embargo, la caridad y la amabilidad, se convierten en virtudes que se practican desinteresadamente por amor a los demás.
4 Compasión
Esta expresión de Madre Teresa nos invita a ser compasivos con los demás, buscar ayudar a aquellos que no tendrán como pagarnos y tratarlos como si estuviéramos tratando a Cristo, así como lo hizo ella.