La actividad física es fundamental para el mantenimiento y mejora de la salud y la prevención de las enfermedades, para todas las personas y a cualquier edad. La actividad física ayuda a la prolongación de la vida y a mejorar su calidad, a través de beneficios fisiológicos, psicológicos y sociales.
Beneficios fisiológicos
La actividad física reduce el riesgo de padecer
- Enfermedades cardiovasculares, tensión arterial alta, cáncer de colon y diabetes.
- Ayuda a controlar el sobrepeso, la obesidad y el porcentaje de grasa corporal.
- Fortalece los huesos, aumentando la densidad ósea.
- Fortalece los músculos y mejora la capacidad para hacer esfuerzos sin fatiga (forma física).
Beneficios psicológicos
La actividad física mejora el estado de ánimo y disminuye el riesgo de padecer:
- Estrés
- Ansiedad
- Depresión
- Aumenta la autoestima y proporciona bienestar psicológico.
Beneficios sociales
- Fomenta la sociabilidad
- Aumenta la autonomía
- Aumenta la integración social, (estos beneficios son especialmente importantes en el caso de discapacitación física o psíquica)