San Simón Stock y su amor que sigue atrayendo devotos a María

Con este sacramental carmelitano, no se puede dejar de lado la figura de este gran hombre que promulgó la devoción a través de este signo

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Como uno de los superiores generales en el Carmelo allá por el inicio del siglo XIII, Simón construyó un gran hábito para la devoción a la Virgen María bajo esta advocación que ya se veneraba, pero la cual cimentó para extenderla en todo el mundo con mayor fuerza.

Súplica

La devoción que tenía San Simón Stock por la Virgen del Carmen, era inmensa, tanto que siempre buscó las formas de propagar su fe, logrando extender la orden pero para llegar a esto, debió rezar mucho a María Santísima quien respondió con entrega generosa al dar el Santo Escapulario en una hermosa visión en la que se estrechó la relación de la Madre de Dios con los Carmelitas, dando fuerza a los ruegos que en aquella época tenían para la aprobación de la orden y colocando las intenciones particulares y comunitarias. Simón, gozaba de alta credibilidad y con la prenda carmelitana, comenzó un nuevo tiempo en la evangelización en Europa, guiada por la Reina y Hermosura del Carmelo.

Legado

Fue y sigue siendo notorio el arraigo que San Simón Stock tenía al confiar plenamente en la Virgen María, distinguido por una especial veneración y amor a la Madre del Carmelo. Fray José Luis Mercado de la Orden de Carmelitas Descalzos de América Central, expone que “como carmelitas agradecemos a San Simón Stock por dejarnos dos elementos de la espiritualidad carmelitana, uno de ellos es la propia Virgen María bajo esta advocación”. Es en violentas persecuciones en Israel por los musulmanes cuando Simón se dirige a María Santísima pidiendo la protección de los carmelitas, surgiendo esta advocación y, por consiguiente, el Sagrado Escapulario como prenda de la salvación para quien lo porta y lo honra como hizo y promulgó San Simón Stock, afirma Fray José Luis.

La aparición de la Virgen a San Simón Stock

La tradición oral y los escritos carmelitanos de la regla alterada, exponen que la Virgen se apareció a Simón Stock en 1251 entregando el Escapulario, signo de Consagración a Cristo imitando a María y signo de la protección y predilección de la Virgen. Su fiesta litúrgica se celebra el 16 de mayo.

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