Con alegría pascual, la Nunciatura Apostólica en Honduras, a través de un mensaje, compartió la noticia de que el Papa Francisco ha otorgado al Padre Giacomo Antonicelli la dignidad de Capellán de Su Santidad, con el título de Monseñor. Dicho nombramiento ha sido formalizado recientemente por las páginas oficiales de la Santa Sede.
“Hacemos llegar una cordial felicitación a nuestro querido Monseñor Giacomo, por este distinguido reconocimiento a su inestimable entrega y colaboración en el servicio diplomático de la Santa Sede”, reza el mensaje dado a conocer en la Arquidiócesis de Tegucigalpa y al mismo tiempo agregan que “valoramos y agradecemos el excelente servicio que brinda a la Nunciatura Apostólica en Honduras y a la Iglesia que peregrina en estas tierras benditas; particularmente, apreciamos su cercana y cualificada colaboración con el Señor Nuncio Apostólico, Su Excelencia Monseñor, Gábor Pintér”.
Alegría
A estas felicitaciones se unió Su Excelencia Monseñor Paul Richard Gallagher, Secretario para las relaciones con los Estados, quien recordaba recientemente que “La diplomacia de la Santa Sede, tiene siempre una clara función eclesial, como instrumento de comunión que une al Romano Pontífice con las Obispos y con las respectivas Iglesias locales”.
Los Capellanes de Su Santidad, son los primeros invitados en participar y acompañar litúrgicamente en la Capilla Papal, es un título honorífico que no debe enorgullecer a la persona, sino más bien debe llamarlo a hacer con más humildad y entrega su servicio. Generalmente se concede a petición del obispo de la diócesis para sacerdotes considerados dignos.