Hace 51 años el Óscar Andrés Cardenal Rodríguez Maradiaga se ordenó sacerdote el 28 de junio de 1970 en la Ciudad de Guatemala, a los 27 años, un regalo de Dios para amarle y poder anunciar la palabra a todos a través de su ministerio.
Monseñor Girolamo Prigione fue quien le dió el orden presbiteral en el Templo Nacional Expiatorio del Sagrado Corazón de Jesús, pero fue hasta el 4 de octubre que el recién ordenado sacerdote Óscar Andrés Rodríguez celebrara su primera misa en Honduras en el imponente templo dedicado a María Auxiliadora en Comayagüela.
El Apóstol Pablo para el ahora Cardenal Rodríguez representa mucho en su apostolado, ya que una de sus frases la ha tomado como estandarte en cada una de sus homilías y prédicas “¡Ay de mi si no evangelizo!”.
Sacerdotes como el Padre Juan Ángel López, párroco del Divino Corazón de Jesús en Tegucigalpa; el Padre Carlo Magno Núñez, rector de la Basílica de Suyapa y los seminaristas del Semanario Mayor Nuestra Señora de Suyapa, se han sumado a las felicitaciones al Arzobispo de Tegucigalpa.
En el año 2020 Suyapa Medios realizó un documental por sus bodas de oro por los cincuenta años de vida presbiteral, llamado como el lema que el mismo ha lleva en su escudo de armas “Para mi la Vida es Cristo”, y enmedio de la pandemia del covid 19 que ataca al mundo y un Rosario rezado a la Virgen de Suyapa por el cese del virus.