Estaban reunidos, en oración, siguiendo el mandato del Señor, aunque no comprendían todavía lo que iba a pasar, esas son algunas de las expresiones que evocan el relato de los Hechos de los Apóstoles, momentos previos antes de la llegada del Espíritu Santo y como los discípulos se prepararon para este acontecimiento. De igual manera, nosotros debemos prepararnos para recibir al Paráclito en nuestras vidas.
Regalo
Para el presbítero Cecilio Rivera, vicario de la Basílica de Suyapa, el Espíritu Santo es un regalo que se nos ha dado a la Iglesia. “Por mucho tiempo se le ha llamado el gran desconocido, porque no se habla mucho del Espíritu Santo, que es una de las personas de la Santísima Trinidad, es por ello que, debemos prepararnos dándole un tiempo al Espíritu, haciendo alguna oración, haciendo algún canto y pidiendo lo que nos dice el Señor en el Evangelio, pidan al Espíritu Santo y se les dará, esa es como una certeza que se nos dará”, dijo. El presbítero recuerda que, el Espíritu Santo nos trae paz, nos trae alegría, nos trae serenidad.
Ejemplo
Para Melvin Herrera, coordinador arquidiocesano de la Renovación Carismática Católica, debemos de irnos al principio e imitar la primera Iglesia. “Aquellos hombres, incluyendo la madre de Dios, que estaban en la infusión del Espíritu Santo, aunque tenían miedo y estaban dudosos, supieron mantenerse en comunidad, unidos en la oración, estar obedientes a la voz y orden que nuestro Señor Jesucristo había dejado y el corazón abierto para que esa gracia, esa promesa de enviarnos al Espíritu Santo, venga y arrope todo nuestro ser”, dijo. Estamos llamados a vivir según el Espíritu Santo es vivir de fe, de esperanza, de caridad; dejar que Dios tome posesión de nosotros y cambie de raíz nuestros corazones, para hacerlos a su medida.
1 Confesión
Si quieren recibir el Espíritu Santo como ese huésped del alma, se debe limpiar la casa. No podemos recibir al Paráclito, si es que nuestra alma está sucia, y en este caso, sería acudir al Sacramento de la Confesión.
2 Virtudes
Una de las mejores formas de agradar al Espíritu Santo, es practicar virtudes. Elige practicar una virtud como la paciencia, la templanza o la prudencia, mientras más virtudes todos los días puedas practicar, mayor agrado recibirá. Te recomendamos las obras de misericordia.
3 Oración
San Agustín decía que nuestro deseo es nuestra oración, por lo tanto, si deseamos ardientemente al Espíritu Santo y le pedimos todos los días: ‘Espíritu Santo ven’, Él vendrá y dará muchos frutos en tu vida.