Se trata de lugares tan significativos para los cristianos como el Monte de los Olivos, donde Jesús se recogió en oración en la víspera de su muerte, o la Basílica del Santo Sepulcro, donde se encuentran el Calvario y la Tumba de Cristo, necesitan urgente ayuda, pues llevan varios meses sin recibir peregrinos a causa de la pandemia.
En total, la Custodia de Tierra Santa, fundada por San Francisco de Asís hace algo más de ochocientos años, tiene el encargo de custodiar ochenta santuarios, desde los más grandes a los menos conocidos, ubicados en las actuales fronteras de Israel, Palestina, Jordania y Siria.
Por disposición de los Papas, la colecta que se realiza en las iglesias del mundo el Viernes Santo, se destina a estos Santos Lugares y a las comunidades cristianas que allí viven y que permiten que no se conviertan en simples museos.
Este año, a causa de la pandemia del coronavirus no fue posible realizar la Colecta del Viernes Santo, por ello el papa Francisco acogió la propuesta de posponer hasta el 13 de septiembre este gesto de compartir que implica a toda la Iglesia.
“¿Por qué el 13 de septiembre? Porque es el domingo más cercano a la fiesta de la Exaltación de la Santa Cruz, que aquí en Jerusalén celebramos con especial solemnidad, recordando hasta qué punto llegó el amor del Hijo de Dios por nosotros: Hasta dar la vida en la cruz, por nuestra salvación, para reconciliarnos con el Padre y entre nosotros, para hacer nacer una humanidad nueva fundada sobre la solidaridad y el amor” explicó fray Francesco Patton, custodio de Tierra Santa.
La colecta a favor de Tierra Santa es un pequeño gesto de solidaridad que toda la Iglesia está llamada a cumplir para ayudar, a través de la Custodia de Tierra Santa, las comunidades cristianas que están en Tierra Santa y sienten sobre sus espaldas el peso y la gloria de la Cruz de Jesús.
El custodio de Tierra Santa concluyó “Estamos llamados a custodiarla, protegerla y sentirla nuestra. Es el origen de nuestra cultura, historia, religió ¡Por ello es necesaria la ayuda de todos!”.