Seguir el camino del Señor no es cosa fácil, pero el que persevera, fortalece su espíritu para seguir adelante y, aunque se presenten dificultades, será más la voluntad que Dios genera para lograr los objetivos y estar al servicio de los demás. Es por ello que Fray Joel Valdez, un joven olanchano que vive en Jerusalén, en el convento donde nació San Juan Bautista en la localidad llamada Ain Karem, ha determinado poner su servicio a Dios a través de ayudar a los demás en su recorrido por Tierra Santa. Actualmente, vive junto con frailes de 13 países y su dedicación en los estudios, lo hace ser un alumno aventajado en Filosofía, estudios que realiza desde hace dos años, así como también en su segundo año de votos temporales.
Algunas de sus actividades son el servicio litúrgico en varios santuarios de la tierra que fue testigo de los pasos de Jesús y desde luego, el cuidado del convento donde habita entre otros. Fray Joel es del criterio que “Al abandonarnos en el Señor, las aspiraciones aumentan en humildad y sencillez de espíritu. Él señala el camino a seguir, solo basta ser obediente para generar la paz que tanto se anhela para poder vivir en armonía”.
De igual forma, él asegura que la normalidad se manifiesta en un joven cuando sus deseos son de superación al estar concentrado en la oración y en el estudio. “A nivel de toda la custodia de Tierra Santa, hay presencia de frailes provenientes de 48 países” agregó y también expresó “veo la vida exterior cada vez más rápida, más consumista y sobre todo muy difícil. En estos últimos años la situación es más complicada y crea confusión entre las personas que no saben qué hacer con sus vidas”. Fray Joel iniciará el próximo año sus estudios de Teología.
