A través de su cuenta de Twitter, el Papa Francisco dijo que ““Toda guerra deja nuestro mundo peor de lo que lo encontró. La guerra es un fracaso de la política y de la humanidad, una rendición vergonzosa, una derrota frente a las fuerzas del mal”, para referirse a la situación bélica que se vive en Ucrania.
El pasado miércoles en la Audiencia General, el Pontífice insistió en que “Jesús nos ha enseñado que la insensatez diabólica de la violencia, se responde con las armas de Dios, con la oración y el ayuno. Que la Reina de la Paz preserve al mundo de la locura de la guerra”.
Según informa Vatican News, la Secretaría del Arzobispado Mayor, con sede en Roma, informó de la llamada telefónica que mantuvieron ayer el Papa y Su Beatitud Shevchuk, Arzobispo Mayor de Kiev-Halyč de la Iglesia greco-católica ucraniana. El Santo Padre preguntó por la situación en Kiev y en Ucrania en general y expresó su voluntad de hacer todo lo que esté en sus posibilidades.
El Pontífice en su diálogo con el Arzobispado Mayor, preguntó por la situación de los obispos y sacerdotes en los territorios más afectados por la operación militar rusa. “A continuación, el Papa agradeció a la Iglesia greco-católica ucraniana su cercanía al pueblo, su decisión de estar a su lado y el haber puesto a su disposición los subterráneos de la catedral de Kiev, que se han convertido en un verdadero refugio. Finalmente, les aseguró sus oraciones e impartió una bendición al sufrido pueblo ucraniano”.
El Papa sorpresivamente visitó este viernes la Embajada de la Federación Rusa ante la Santa Sede, encabezada por Alexander Avdeev, para expresar su preocupación por la guerra sucitada en Ucrania.