En torno al decreto Quemadmodum Deus donde el papa beato Pío IX proclamó a San José como Patrono de la Iglesia Católica, hoy culminó el ciclo de catequesis que son complementarias a la Carta apostólica Patris corde, escrita con ocasión de los 150 años de la proclamación de San José como Patrón de nuestra Iglesia, las cuales fueron impartidas por nuestro Santo Padre, Francisco.
En la catequesis, su santidad explica que la imagen que San José representa en la Sagrada Familia de Nazareth es la de un “Custodio” que resguarda el propósito de Jesús, que es “Dios hecho Hombre” y el de la Virgen María que es “La primera discípula”.
En este sentido el Papa comentó que “Debemos preguntarnos siempre si estamos protegiendo con todas nuestras fuerzas a Jesús y María, que están misteriosamente confiados a nuestra responsabilidad, a nuestro cuidado, a nuestra custodia”.
El sumo pontífice, afirma que al igual que San José, como cristianos estamos llamados a “Custodiar la vida, custodiar el desarrollo humano, custodiar la mente humana, custodiar el corazón y trabajo humano”.
Francisco enmarca la relevancia del cuidado del uno con el otro en el hecho de que muchas veces la iglesia, permite la murmuración y el juicio, situación que perjudica directamente el cuidado de la misma y afirma que “la Iglesia no es ese grupito que está cerca del sacerdote y manda a todos, no, la Iglesia somos todos… en camino… a custodiar el uno del otro, custodiarnos mutuamente”.
En su catequesis, el santo cordero comenta que parte de la esencia misma de la iglesia es el pecador que busca la misericordia de Dios para ser participe del testimonio de los milagros de Cristo e invita a todos los cristianos a reflexionar que “allí donde nuestros errores se convierten en escándalo, pidamos a san José la valentía de enfrentar la verdad, de pedir perdón y empezar de nuevo humildemente”.