La oración por los pontífices se viene dando a lo largo de los siglos en la Iglesia Católica que aboga para que, por el rezo de los fieles, las intenciones, proyectos, viajes y todo el ministerio petrino del Papa se continúe con un santo caminar. Con el actual sucesor de Pedro, este llamado incrementó ante sus acostumbradas frases: “No se olviden de rezar por mí” al visitar países o presidir eventos.
Insistencia
Cada vez que el Obispo de Roma se encuentra con un religioso, un laico o un jefe de Estado, culmina su reunión con la petición de rezar por él. El padre Juan Ángel López, párroco de la comunidad Sagrado Corazón de Jesús en Tegucigalpa, explica que “Esto es parte de su personalidad y la conciencia que él tiene de la delicadeza de su ministerio”. Por su parte, Eduardo Ramos, miembro del Instituto Hondureño de la Doctrina Social y quien además ha compartido con el Santo Padre en algún encuentro, afirma que “Rezar por el Papa es algo fundamental de todo cristiano y de todos los bautizados. El Papa necesita ayuda, apoyo y personalmente en algún encuentro me lo ha pedido”. Además de las prácticas tradicionales para elevar una oración por él, también se ha innovado creando aplicaciones para responder de manera favorable a este llamado del Pontífice.
Entendimiento
Toda misión encomendada exige una respuesta con compromisos y retos, la que asumió el Cardenal Bergoglio aquel 13 de marzo de 2013 no es para menos, por lo que Eduardo Ramos, expresa que “el Papa no quiere estar solo, desea sentirse cercano al pueblo de Dios. Los tiempos no son fáciles y la oración debe ser constante, no solo por él, sino por todas las obras que desarrolla en la Iglesia”. La magnitud del ministerio del Sumo Pontífice, exige una oración frecuente y fervorosa afirman, por lo que su servicio para la Iglesia, debe ser sujetado por las humildes plegarias de todos los que se preocupan y velan por el buen caminar del catolicismo. La comprensión que el Papa tiene de la tarea encomendada a la que se refiere Ramos, se refuerza con la opinión del padre Juan Ángel López, al mencionar que “es su personalidad y la conciencia que él tiene de la delicadeza de su ministerio”. Llama la atención que esta insistencia del sucesor de Pedro y su carisma, han hecho que no católicos también se sumen a las oraciones por su persona, un hecho claro de comunión.
