Este domingo, que se recuerda a San Joaquín y Santa Ana, patrono de los abuelos, es importante destacar que los abuelos han sido esenciales en la vida, porque comunican el patrimonio de la humanidad y de la fe ante la sociedad. La Iglesia invita a luchar contra la cultura del descarte como lo ha pedido el Papa Francisco, especialmente una cultura del descarte contra los abuelos.
La psicóloga Delmi Torres de Pagan, nos ofrece una reflexión del porque no debemos descartar a los abuelitos:
La pandemia ha venido a desequilibrar al ser humano generando crisis en su vida, y de una manera directa afectando la salud de todos, pero en especial de las personas de la tercera edad, siendo ellos los más afectados según las estadísticas ya que las posibilidades de recuperarse son más limitadas por sus enfermedades de base y condiciones médicas que pueden padecer. Pero es importante que en las familias podamos valorar a los abuelitos y abuelitas y cuidarlo en estos momentos de pandemia, es labor de los más jóvenes protegerlos y no exponerlos. Es característica de la tercera edad compartir historias del pasado, como fueron sus mejores tiempos, como vivieron y disfrutaron su juventud, lo hacen con la mejor intensión de aconsejar, ellos tienen un gran tesoro acumulado de conocimiento experiencia y con una disponibilidad de poder compartirla con los niños y jóvenes de su familia, enriqueciendo su crecimiento y desarrollo transmitiéndoles sabiduría ayudándolos a tomar mejores decisiones y orientándolos por el camino correcto. Aprendamos a escucharlos, un día ya no estarán con nosotros y necesitaremos un consejo .