La Iglesia se prepara para conmemorar la festividad de dos grandes santos, nos referimos a San Pedro y San Pablo, hombres valientes que dieron su vida por el Evangelio. Estos santos son pilares fundamentales de la Iglesia y como ellos debemos de estar convencidos que esta vida no termina con la muerte, nosotros creemos en la resurrección del Señor, debemos ser hombres y mujeres de fe, no algo superficial, que se alimente de la oración, los sacramentos y la devoción mariana, que vivamos en comunidad, compartiendo todos, sin rutinas unidos ayudándonos mutuamente.
La festividad de estos apóstoles se celebra el 29 de junio y son muchas las comunidades en toda Honduras que han adoptado a estos discípulos como sus patrones, y durante nueve días realizan diversas actividades religiosas que sirven para edificar la vida de la feligresía.
Ante la crisis sanitaria que todavía afrontamos por el coronavirus, situación que limita a muchas personas a no salir de sus casas por temor a un contagio, le invitamos a que elabore un altar en un rincón de su casa para que en familia puedan realizar la novena a los santos Pedro y Pablo para pedir a ellos que intercedan por el bienestar de nuestro país, por el cese de la pandemia y por cada una de sus intenciones personales.