Este día el decanato San Francisco de Asís contó con la grata visita del Arzobipo de Tegucigalpa, Monseñor José Vicente Nácher, eligiendo como sede para este encuentro el templo parroquial San Juan Bautista de Ojojona, donde se celebró la Santa Eucaristía y hasta donde llegaron los sacerdotes de esta zona sur de Francisco Morazán, acompañados de algunos feligreses.
Durante su intervención Monseñor Nácher agradeció a todos por el trabajo que realizan en sus comunidades y recalcó que el arzobispo, toda la arquidiócesis y la Iglesia Universal están unidos íntimamente en Cristo, “Nuestra lógica no es la del mundo, si nos empeñamos en mantener nuestra lógica del mundo en la Iglesia nos desesperamos y por supuesto no servimos para lo que hemos sido llamados” además añadió que “nuestra relación con Dios es una relación de fe, esperanza y amor”
Y por último dijo que “la misión de la Iglesia, del decano, de la parroquia, de la comunidad, de un grupo o movimiento no es una actividad humana, sino una participación del Amor Trinitario de Dios”.
Alegría
Sin duda que esta visita del arzobispo representa confirmar a los hermanos, dice el padre Tony Salinas, párroco de Ojojona, y añade que “En la persona del obispo sucesor de los apóstoles la Iglesia se vuelve a sentir en comunión con su cabeza que es Cristo y al mismo tiempo se anima para seguir militando en las cuatro dimensiones: Comunidad de comunidades, Pascual, Samaritana y Misionera.
Además, asegura que la presencia de los párrocos y sacerdotes de las comunidades que integran el decanato San Francisco de Asís conformado por los municipios de: Reitoca, Sabanagrande, Lepaterique y San Juan de Ojojona, los hace sentir muy fortalecidos como familia presbiteral.
La feligresía también se mostró muy contenta con esta visita pastoral, porque aseguran que esto los impulsa a seguir trabajando con más ímpetu en la misión que han recibido dentro de la Iglesia, porque reconocen que necesitan seguir edificando el reino de Dios y poniéndose todos al servicio de una Iglesia que debe ser siempre servidora.
