El martes 10 de enero, el obispo de la Diócesis de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez, vivio la audiencia inicial que determinó enviarle a juicio, así como mantenerlo bajo arresto domiciliario.
En un comunicado enviado por Twitter en la cuenta oficial del abogado Yader Morazán, este informó a la población en general que monseñor Rolando Alvarez “enfrentó su audiencia general en el Complejo Judicial Central”, en Managua, ciudad capital de Nicaragua.
A Monseñor Álvarez se le acusa de “conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional y propagación de noticias falsas en perjuicio del Estado y la sociedad”.
En hechos relacionados, el Complejo Judicial Central también emitió una nota de prensa donde acusa al sacerdote Uriel Antonio Vallejos por los mismos delitos de monseñor Álvarez, por lo que también se le mantiene una orden de captura. Vallejos se encuentra exiliado en Italia desde el pasado 3 de septiembre debido a la persecución sufrida por muchos miembros de la Iglesia Católica por parte del gobierno de Daniel Ortega.