Cada 21 de septiembre se conmemora el “Día Internacional de la Paz”. Una jornada que Naciones Unidas ha dedicado al fortalecimiento de los ideales de paz, a través de la observación de 24 horas de no violencia y alto el fuego.
Durante todo su pontificado, Francisco no ha parado de llamar la atención al mundo para reflexionar sobre este valor a fin de construir una verdadera paz. Ha pedido no banalizar el concepto de paz.
El 15 de marzo de este año 2020 el Santo Padre dijo que, “Se suele pensar que paz significa calma, armonía, equilibrio interior. Este significado es incompleto y no puede ser absolutizado, porque en la vida la inquietud puede ser un momento importante de crecimiento. Muchas veces, el Señor siembra en nosotros la inquietud, para que nos acerquemos a Él y lo encontremos”.
Francisco también recordó que todas las personas tienen la responsabilidad de cuidar al prójimo, un deber que existe desde la Creación del mundo, y que es la base de la paz.
También el 7 de septiembre del 2013 francisco recordó “Cuando el hombre piensa sólo en sí mismo, en sus propios intereses y se pone en el centro, cuando se deja fascinar por los ídolos del dominio y del poder, cuando se pone en el lugar de Dios, entonces altera todas las relaciones, arruina todo; y abre la puerta a la violencia, a la indiferencia, al enfrentamiento”.
El Papa también dijo que hace falta más coraje para buscar la paz que para declarar la guerra. Y ha pedido a líderes de todo el mundo que respeten los pactos y eviten las provocaciones. También ha recordado a las víctimas de las guerras.
Asimismo el 8 de junio del año 2014 sostuvo que, “Muchos, demasiados de estos hijos han caído víctimas inocentes de la guerra y de la violencia, plantas arrancadas en plena floración. Es deber nuestro lograr que su sacrificio no sea en vano. Que su memoria nos infunda en nosotros el coraje de la paz”.
No banalizar el concepto de la paz, responsabilidad y coraje: Tres propuestas del Papa que buscan el despertar de la humanidad, aún en los actuales momentos en los que la fraternidad es fundamental para mirar al mañana.
