Unos 31 nuevos lectores y 19 nuevos Ministros Extraordinarios de la Comunión (MEC) fueron instituidos por Monseñor Vicente Nácher, Arzobispo de Tegucigalpa, en la Parroquia La Guadalupe de esta capital. Estos hermanos, que han perseverado en el Señor, han sido llamados, reconociendo su papel protagónico en la evangelización.
Bendición
Rubenia Caballero, nueva servidora en esta comunidad parroquial dijo que “Estamos muy contentos y, particularmente me siento bendecida, pero a la vez sé que esta es una responsabilidad muy grande” reconoció Rubenia, pero también reafirmo el sí que le han dado a Dios tras esta bendición.
Ante el Señor, los nuevos servidores reafirmaron el compromiso, ya sea en la proclamación de la Buena Nueva o en la entrega de la Comunión, ese es el sentimiento que expresa Helen Flores, al ser designada como nueva lectora. “Para mi esta es una alegría, una bendición y un gran privilegio estar dando nuestros dones al servicio del Señor”, y agregó que esto es una bendición para ella y su familia.
Estos nuevos ministros están llamados a transmitir con su vida, obra y acciones el profundo amor a las Sagradas Escrituras y a la Eucaristía, siendo ejemplo con su testimonio, y estando acorde con las enseñanzas de la Iglesia. Además de ello, su labor también será la de orar y también mantener una vida con un testimonio coherente con lo que ellos predican y hacen, no solo para su comunidad parroquial, sino también para sus ambientes laborales, familiares y con sus amigos en las diferentes facetas.
1 Servicio
Es un ministerio laical contemplado en la Iglesia Católica y estipulado en el Canon 230, párrafo tercero del Derecho Canónico que dice: “Donde lo aconseje la necesidad de la Iglesia y no haya ministros, pueden los laicos, aunque no sean lectores ni acólitos, suplirles en algunas de sus funciones.
2 Preparación
En el canon siguiente (231) establece que “Los laicos que de modo permanente o temporal se dedican a un servicio especial de la Iglesia tienen el deber de adquirir la formación conveniente que se requiere para desempeñar bien su función, y para ejercerla con conciencia, generosidad y diligencia”.
3 Lectores
El lector ha sido instituido para hacer las lecturas de la Sagrada Escritura, excepto el Evangelio. Puede también proponer las intenciones de la oración universal y, cuando falta el sal- mista, decir el salmo entre las lecturas. Debe de ser también una persona de mucha oración y compromiso dentro de su comunidad.