El Papa Francisco escribe al cardenal Eijk para recordar la figura de su predecesor en la catedral de Utrecht, fallecido ayer a la edad de 88 años. El Colegio Cardenalicio está compuesto ahora por 220 cardenales, 122 electores y 99 no electores.
“Me uno a vosotros para dar gracias a Dios Todopoderoso por el fiel testimonio al Evangelio del difunto Cardenal”. Es un pasaje del telegrama del Papa al cardenal Willem Jacobus Eijk con el que Francisco se une al dolor de la iglesia de Utrecht, en los Países Bajos, que ha perdido ayer un punto de referencia.
Nacido el 26 de noviembre de 1931 en Lisse, diócesis de Rotterdam, primero de once hermanos, el cardenal Simonis recibió la ordenación sacerdotal el 15 de junio de 1957, después de haber completado sus estudios en los seminarios de “Hageveld” y “Warmond”.
De 1959 a 1966 estudió exégesis bíblica en Roma, completando los cursos con una tesis sobre los textos del Evangelio de Juan relacionados con el Buen Pastor. De regreso a casa, fue nombrado vicario de una parroquia en La Haya, con la tarea especial de cuidar la pastoral de los enfermos en el hospital local de la Cruz Roja.
Elegido obispo de Rotterdam el 29 de diciembre de 1970, recibió la ordenación episcopal el 20 de marzo del año siguiente, eligiendo como su lema “Ut cognoscant Te”. El 27 de junio de 1983 fue nombrado arzobispo Coadjutor de Utrecht con derecho de sucesión al cardenal Johannes Willebrands, acaecida el 3 de diciembre de 1983.
También fue presidente de la Conferencia Episcopal de los Países Bajos, dentro de la cual dirigió las Comisiones de Educación y Religión, prodigándose mucho por la tutela de la vida, la familia y el matrimonio, según la doctrina católica.
El 25 de mayo de 1985, San Juan Pablo II lo nombró Cardenal, con el título de San Clemente. Había participado en el cónclave de abril de 2005 que eligió al Papa Benedicto XVI y se convirtió en arzobispo emérito de Utrecht el 14 de abril de 2007.
Con su fallecimiento, el Colegio de cardenales se reduce a 220 purpurados. De ellos, 98 no tienen derecho a votar en un cónclave, por ser mayores de 80 años. Actualmente hay 122 cardenales electores, 66 de ellos creados por Francisco.