El Padre Ovidio Rodríguez: El guardián de los “Anawin” del Señor

Aquellos más necesitados, los olvidados por la sociedad, han sido los predilectos en su misión.

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Conocido por muchos por su elocuencia,su presencia en los medios de comunicación, así como la gran labor realiza por muchísimos años en Suyapa, el Padre Ovidio Rodríguez es un sacerdote con olor a oveja que hasta fue catalogado por muchos como el “obispo” de los pobres. Este presbítero se ha ganado el cariño de la gente, por la gran labor evangelizadora que realiza.

Historia

Es oriundo del municipio de Cantarranas, un apasionado por la enseñanza y el amor a los pobres. “Nací en una familia campesina, mi papá carpintero, cultivaba arroz. Mi mamá una ama de casa, de una familia de ocho, yo soy el cuarto, somos cuatro negros, cuatro blancos, no me pregunten en qué lado estoy” y es que así es el, siempre alegre, bromista,pero, sobre todo, cercano a las personas.

Por la situación de pobreza, le toca migrar y le toca vivir un tiempo con sus abuelos, “nacimos cada dos años, para remplazar de la cama del rincón de mamá te pasaban con los abuelos”. El Presbítero recuerda que su abuelo era un hombre muy piadoso, “con él rezábamos el Ángelus a mediodía, él era analfabeta, sabía leer, pero no sabía escribir,sólo sabía firmar. Mi abuela le enseñó y él nos leía historias sagradas”.

“El pobre es protagonista cuando lo hacemos protagonista, sino lo hacemos asistencialistas”. Padre Ovidio Rodríguez.

Vocación

Esta enseñanza, va a ser determinante, en su camino vocacional. El Padre Nery, como lo conocen en su familia. Ya que la crianza recibida por sus abuelos, fue forjando la vocación en su vida. “Desde pequeño quise ser sacerdote. Si no hubiera estudiado medicina o historia”. Luego de sus estudios en el Seminario Menor en donde se destacó por la excelencia en sus notas, el Padre Ovidio cursa los seis años que se estudiaban en el Seminario Mayor, en aquella época con una peculiaridad, tuvo que salir un año del Seminario, “pasé una prueba que valió la pena. Di clases en el Instituto Sagrado Corazón, me dieron primaria, catequesis, quinto y sexto. Cuando vieron que no era tan bruto, me pasaron a último año de bachillerato a dar Historia de Honduras, Filosofía y Trabajo Social”. Concluyó en Costa Rica su formación sacerdotal y ya siendo presbítero, estudió en Roma por dos años.

Misión

Ha sido uno de los pilares de la formación delos Delegados de la Palabra en los últimos años, trabajó fuertemente en la parroquia San José Obrero, en donde construyó varios templos. En Suyapa estuvo más de 15 años y recuerda que en cierta ocasión “los cantineros que vendían en la feria de Suyapa me secuestraron por tres horas, porque hubo ley seca y ellos se habían abastecido. No me dejaron salir. El siguiente año fue declarado zona de reserva moral”. Tuvo un año sabático y pasó alrededor de seis años sin parroquia. Ahora es párroco en la Iglesia Divino Niño.

  • Conozca al Padre Ovidio Rodríguez
    Es oriundo de una aldea de Cantarranas, Estudio en el Seminario Menor San José, en el Instituto San Miguel. Se ordenó diácono en enero de 1981 en la Villa de San Francisco, en noviembre del mismo año recibió el orden sacerdotal en Cantarranas por imposición de manos de Monseñor Héctor Enrique Santos. Es motaguense y su amor por el fútbol nace en Talanga, aunque durante su formación, practicaba mucho el baloncesto, aprendió a saltar con cadenas en los tobillos.

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