En una tierra santa, pero al mismo tiempo de grandes tensiones, Cayetana Johnson, arqueóloga estadounidense teme la reaparición de un enemigo latente.
El coronavirus no da tregua y su paso por Tierra Santa puede tener un resultado desgarrador. Siendo el centro de las religiones abrahámicas, es uno de los principales destinos de peregrinaje del mundo, su mayor fuente de ingresos.
El año pasado 4 millones y medio de personas visitaron Israel, algo que ha cambiado drásticamente. Aunque no es la primera vez que una pandemia amenaza a esta tierra ancestral.
Para Cayetana Jhonson “Toda esta pandemia está afectando a Tierra Santa de manera importante como también sucedió en el pasado. Las pandemias históricas, desde las antiquísimas que se dieron ya desde antes de la era cristiana, especialmente las del imperio romano. Como la plaga antonina del Siglo II, en el tercero, en el 260 tuvimos la de Cipriano”.
Actualmente Israel se encuentra en alerta por la segunda ola de contagios de COVID19. Aunque el gobierno apuesta a la reapertura de los aeropuertos al flujo turístico, los últimos datos del virus no son alentadores. Por eso, algunos centros de salud se han puesto en alerta temprana.
A criterio de la arqueóloga Jhonson “Curiosamente está dándose una colaboración estrechísimamente con sus vecinos árabes. “Sabemos que hay una importante preocupación, especialmente hacía sus vecinos que son los palestinos pero también hay otros árabes. Musulmanes o cristianos que viven en Israel y que están trabajando mano a mano”.
Johnson manifestó “Si se sabe que el Daesh está, de manera soterrada, esperando el momento adecuado para dar, lo que ellos entienden, el golpe final. Aprovechando la debilidad, la preocupación de los países y que, ahora mismo abrir un frente o un frente nuevo además del vírico provocaría situaciones realmente dramáticas”.
Ante esta posible amenaza, dice que se mantiene una constante vigilancia en las fronteras israelíes, ya que se trataría de una situación que simplemente causaría mayores estragos a la ya presente crisis por la pandemia.