Ecos de una sinodalidad hondureña en misión

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Los padres y madres sinodales contaron entre sus filas con tres representantes de Honduras, el Cardenal Óscar Andrés Rodríguez, Sor Suyapa Cacho y Monseñor José Vicente Nácher

Con el objetivo de ser una Iglesia sinodal en misión, se desarrolló en el mes de octubre la Asamblea de los Obispos en Roma que, de manera particular, contó con la participación de laicos, de religiosos y religiosas, destacando que la Iglesia siempre está a la escucha de todos. En esta experiencia, tres representantes de Honduras, que han dejado plasmada la acción de Dios en este caminar.

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Para Monseñor José Vicente Nácher, Arzobispo de Tegucigalpa, esta fue su primera experiencia en un sínodo. “Para mí ha sido algo transformador, aprendiendo en la misma práctica, como vivir, dialogar, escucharnos de manera sinodal, siendo esta la gran propuesta en lo que se convierte un sínodo que, en sí mismo, quiere llegar y ser parte de todos”. Monseñor Nácher explicó que, a medida se iba desarrollando el Sí nodo, “cada vez más nos inspira la confianza y menos las dudas, más la ilusión y menos los temores, porque vemos que es el Espíritu Santo el que guía y el que quiere que todos vayamos siendo parte de este camino sinodal”. Sor Suyapa Cacho, religiosa de origen garífuna, destacó que, este caminar fue una experiencia significativa, el compartir todos juntos como hermanos, entre seglares, obispos, religiosas. “Ha sido una acción del Espíritu Santo que está con nosotros en todo momento y estos frutos pueden servir para nuestra vida, como en nuestra Latinoamérica y todos los que siguen este proceso”, puntualizó.

Frutos

El de mayor experiencia en este caminar, el Cardenal Óscar Andrés Rodríguez, refiriéndose a lo que sigue para la Iglesia sinodal, explicó que, “Se ha escrito una carta al pueblo de Dios y yo quiero invitar a todos a leerla, a meditarla y a orar con ella, porque este es uno de los frutos y al mismo tiempo, el inicio de esta pedagogía que queremos difundir, que es la pedagogía de la conversación espiritual”.

1 Sinodalidad

La sinodalidad es una forma de vivir la Iglesia, intentado ofrecer una respuesta, valorando la apertura a la escucha y al acompañamiento, las diferencias y desarrollando la participación de todos y cercana a las heridas del mundo.

2 Misión

La Síntesis del Sínodo explica que, La sinodalidad va de la mano de la misión, como un nuevo “estilo pastoral” por lo cual, es necesario que las comunidades cristianas compartan la fraternidad con hombres y mujeres de otras religiones, convicciones y culturas.

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