Las Hermanas de la Congregación Hijas del Sagrado Corazón de Jesús, que están a cargo del Hogar de Ancianos Nuestra Señora de Guadalupe de La Lima, Cortés, celebraron con los abuelos y benefactores el día del Sagrado Corazón de Jesús. El Padre Luis Estévez presidió la Eucaristía que fue concelebrada por el Padre Matías Gómez Franco, Párroco de la comunidad Emmanuel de San Manuel Cortés.
Renovación
Las Hermanas Sor Rosalinda del Inmaculado Corazón de María, Sor Felicita de Jesús y Sor María de Jesús Resucitado, renovaron sus votos con mucha alegría ante los abuelos y las personas que acompañaron, entre ellos las religiosas de esta congregación y las misioneras Catequistas de San José.
Fiesta
Por su parte, siempre en este mes, la comunidad parroquial del Inmaculado Corazón de María del sector de la colonia Rivera Hernández, festejó su fiesta patronal que congregó a todas las capillas que conforman esta parroquia para compartir en la Santa Eucaristía que fue presidida por el Obispo Emérito de esta Arquidiócesis de San Pedro Sula, Monseñor Ángel Garachana y concelebrada por el Párroco Jorge Aguilar y el Vicario, Presbítero Jeremías Lemus.
La celebración fue muy emotiva. Esta comenzó con la procesión desde la comunidad Santa Teresa de Jesús de la colonia Felipe Zelaya hasta llegar a la sede parroquial donde Monseñor presidió la Misa. Monseñor Ángel en su homilía expresó que “A ejemplo de María llevemos a Jesús en nuestro corazón. En Él creemos, lo amamos, es todo para nosotros, camino, verdad, luz, vida y esperanza. A ejemplo de María nosotros guardemos también en nuestro corazón sus palabras y sus obras, tengamos un corazón impregnado, lleno del amor a Dios y al prójimo”. Los fieles de las comunidades de la parroquia al finalizar la Misa compartieron fraternalmente.
La devoción al Corazón de Jesús ha existido desde los primeros tiempos de la Iglesia, cuando se meditaba en el costado y el Corazón abierto de Jesús, de donde salió sangre y agua. De ese Corazón nació la Iglesia y por ese Corazón se abrieron las puertas del Cielo. La devoción al Sagrado Corazón está por encima de otras devociones porque veneramos al mismo Corazón de Dios. Pero fue Jesús mismo quien, en el siglo diecisiete, en Paray-le-Monial, Francia, solicitó, a través de una humilde religiosa, que se estableciera definitiva y específicamente la devoción a su Sacratísimo Corazón.
HISTÓRICA DEVOCIÓN
El 16 de junio de 1675 se le apareció Nuestro Señor y le mostró su Corazón a Santa Margarita María de Alacoque. Su Corazón estaba rodeado de llamas de amor, coronado de espinas, con una herida abierta de la cual brotaba sangre y, del interior de su corazón, salía una cruz. Santa Margarita escuchó a Nuestro Señor decir: “He aquí el Corazón que tanto ha amado a los hombres, y en cambio, de la mayor parte de los hombres no recibe nada más que ingratitud, irreverencia y desprecio, en este sacramento de amor.”