La Semana Santa nos llama a la reflexión detenida de la Pasión, Muerte y Resurrección de nuestro Señor Jesús. Con este ánimo, podemos dedicarnos a eso mismo por medio del consumo de piezas cinematográficas que ilustran estos acontecimientos. A continuación, te presentamos cuatro producciones que no puedes dejar de ver en esta Semana Santa.
Hijo de Dios (Son of God) (2014)
En la misma vena que lo visto en La Pasión de Cristo de Mel Gibson (otra película muy recomendada también), “Hijo de Dios” nos presenta la vida de Jesucristo. En ella podemos ver la vida de nuestro Señor desde su nacimiento a su resurrección. A diferencia de otros filmes con la misma trama, “Hijo de Dios” da mucho énfasis a la vida pública de Jesús.
Cristiada (2012)
¡Viva Cristo Rey! “Cristiada” del año 2012 narra los acontecimientos suscitados en la década de 1920, donde gran parte de la feligresía católica ubicada en México fue perseguida por el gobierno, donde fueron sujetos a muchas situaciones indeseables. Entre el martirio y el conflicto bélico, estos sucesos definitivamente dejaron una huella enorme en la historia de la Iglesia Católica en México.
Pablo, apostol de Cristo (2018)
En muchas ocasiones en la historia, la comunidad cristiana ha sido motivo de persecución, situación que se presenta en este filme de 2016 donde en el elenco podemos encontrar a Jim Caviezel (que también estelariza La Pasión de Cristo en el papel de Jesús.) encarnando a San Lucas, quien al igual que el resto de la comunidad cristiana de la época fue perseguido debido a sus creencias por el gobierno en la antigua Roma.
Resucitado (Risen) (2016)
El cine de la Iglesia Católica ha ido evolucionando al punto que se presentan tramas relacionadas a este tema, pero desde el punto de vista de los no creyentes. Tal es el caso de “Resucitado” del año 2016, filme que nos presenta la Resurrección del Señor desde los ojos de dos romanos, Clavius y Lucius, quienes buscan investigar que pasó con Jesús en las semanas posteriores a su muerte.
Aprovechemos nuestra Semana Santa para contemplar y entender el significado enorme de lo ocurrido. Como nuestro Señor Jesús dio y continúa dando su vida para el perdón de nuestros pecados y por la salvación del mundo entero.
