En su homilía de este día, el Cardenal Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga, arzobispo de la Arquidiócesis , comenzó su mensaje con la línea de Jesús en el evangelio de hoy “Yo soy el pan vivo bajado del cielo“, que se entrega para dar vida al mundo entero.
Jesús es palabra hecha carne por eso dice “el pan que yo les daré es vida para el mundo” esto quiere decir que nos dice que el Espíritu Santo no se da fuera de la realidad humana por lo tanto la carne no solo es el lugar donde Dios se hace presente sino el amor del padre a la humanidad, dijo el Cardenal Rodríguez.
El arzobispo de Tegucigalpa agrega que celebrar su presencia real, ahí está Jesús, quien esta presente en cada una de las eucaristías, esto exhorta a quien comulga a dejar la indiferencia, violencia, intolerancia y actitud egoísta sino tener conciencia que el cuerpo de Cristo nos lleva a ser bondadosos, llenos de amor y paciencia, comprensivos además de misericordiosos como el mismo hijo de Dios que bajo a la tierra.
Cada vez que participamos en la eucaristía, debemos abrazar al otro en este banquete que el Señor nos ha dejado, concluyó en su mensaje.