Este día se celebra a San Jerónimo Emiliani, que se caracterizó por el servicio a enfermos, ancianos, niños y jóvenes. Conozcamos de la orden que fundó y está en Honduras.
La Orden de los Clérigos Somascos tiene su principal carisma servir a los más pobres, enfermos y a los ancianos, además de atender a los niños huérfanos. Los religiosos sirven en la Parroquia San Juan Bautista de la Colonia Kennedy. Para el año 2011 celebraron su jubileo, conmemorando los 500 años de liberación de la cárcel de su fundador, San Jerónimo Emiliani. Este año 2021 cumplen 100 años en América.
El Padre Nino Sacchi, antiguo párroco de la comunidad San Juan Bautista definió a la orden de los Somascos como “la Misericordia de Dios”, hacia los más necesitados, huérfanos, abandonados, los de las familias sin recursos, ya que su fundador se dedicó a los niños a quienes les creó hogares, esto, con la ayuda de laicos voluntarios muy comprometidos en diferentes partes donde se requiera la atención de los pequeños y jóvenes con proyectos de educación y salud, y sobre todo, con la evangelización para los colaboradores, ayudándoles a dar un testimonio de vida de fe.
Obras
En el municipio de San Buenaventura en la zona que se llama las Anonas, cuentan con un hogar con varios niños que atiende una pareja, igual que religiosos, siempre pendientes de las necesidades; allí a los niños se les enseña a cultivar hortalizas, vienen a la parroquia a vender el fruto de su trabajo y los fondos sirven para su sostenimiento en los hogares y para sus cosas personales.
También poseen un kínder, escuela y colegio, en donde llegan personas muy necesitadas, se mantiene un hogar en la parroquia donde viven varios niños que son desprotegidos y donde van a recibir sus clases. Los fondos de la escuela y colegio sirven para sostener la obra de los que quedaron sin padre y madre y que vienen de muchas zonas; aquí reciben una buena atención hasta que ellos se hacen profesionales. Asimismo, hay personas de la parroquia que apadrinan niños proporcionando lo necesario para salir adelante en estudios y necesidades personales. Se ha decidido enseñar el idioma italiano para poder optar a becas en este país, mismas que son utilizadas para formación profesional y promoción de artes y deportes desarrollando capacidades. La colaboración de los padres Somascos ha sido vital en el mejor funcionamiento de la comunidad, en mayor escala en zonas rurales y donde existe poca esperanza de progreso.