Reunidos en la Basílica de Suyapa la Conferencia Episcopal de Honduras y la Nunciatura Apostólica en Honduras encomendaron a Dios el alma del Papa Emérito Benedicto XVI, quien retornó a la casa del Padre el pasado 31 de diciembre de 2022.
El pueblo de Dios también se hizo presente para poder ser parte de la Santa Misa presidida por Su Eminencia Cardenal Rodríguez en compañía de los obispos de las diferentes diócesis del territorio hondureño y el representante del Vaticano en el país.
La feligresía asistió a la casa de la Virgen de Suyapa para acompañar este momento en el que se gana un gran ser humano y pontífice en el cielo para que en algún momento, con la gracia de Dios, sea elevado a los altares.
Por su parte el Cardenal Rodríguez en su homilía destacó que la celebración es un acto de fe para la Iglesia en Honduras, ya que Benedicto XVI fue quien dio el sí, para la creación de las diócesis de Yoro y Ceiba.
Asimismo el Nuncio Apostólico en Honduras, Monseñor Gábor Pintér, dedico unas palabras al concluir la Santa Eucaristía en donde destacó el legado del pontífice en cuatro fuentes de inspiración y teología, entre ellas Jesucristo, la comunión el arte y el diálogo, expresó.