Con la participación de sacerdotes, religiosas y laicos participaron en la clausura en la Eucaristía que ofició el padre Carlo Magno a las 11 de la mañana de este domingo en la Basílica de Suyapa quien al principio destacó la labor que realiza la Pastoral de Movilidad Humana en beneficio de los migrantes.
En la homilía el padre Magno, se refirió a la corrección fraterna de como corregir a los demás según las instrucciones que nos presenta el Evangelio según San Mateo el día de hoy, se trata de la obligación de todos aquellos que tiene personas a su cargo, padres de familia, educadores superiores, pastores del pueblo de Dios.
Dijo que es obligación de no dejar pasar las faltas que deben ser corregidas, pero hacerlo tiene que seguir las instrucciones, que el Señor nos da en el Evangelio el día de hoy, en la segunda lectura, el apóstol Pablo nos habla de la deuda del amor mutuo, que tenemos para con nuestro prójimo y una de esa deudas que tenemos para con nuestro prójimo es el de la corrección.
Porque si amamos vamos a corregir, no humillar al otro, sino para que enmiende su culpa, no es que queramos atacar el pecado del otro, o a él como persona sino que cambie y que sea mejor, sabemos que todos los consejos y exigencias de Dios para los seres humanos están dirigidos al bien de cada uno de nosotros en particular a hacernos mejor personas.
El sacerdote explicó que a veces no aceptamos las correcciones y actuamos con soberbia, no importa la edad que haya en nuestras vidas, siempre necesitamos corrección, siempre necesitamos consejo de otro y a veces no somos humildes y no las aceptamos, nos hinchamos de soberbia, porque talves ostentamos un puesto, un cargo, o nos creemos los sabios y nos endiosamos.
Siempre necesitamos de los demás sostuvo, siempre necesitamos el consejo del hermano del amigo, del compañero de aquel que nos ama, y el consejo debe llevar la corrección, debe llevar como nos dice San Pablo la deuda del amor, aceptemos los consejos y las observaciones que nos hacen para ser mejores personas.
En la presentación de dones, se llevaron al altar el signo de la familia, el mundo porque la migración es mundial, el material y el afiche utilizado durante la semana, la mochila que porta el migrante cuando decide buscar en otro país mejores condiciones de vida para su familia.