“Porque tuve hambre y me diste de comer, tuve sed y me diste de beber, fui forastero y me recibiste”, con la confianza de estas palabras cientos de hondureños salen de un Estado en donde las oportunidades se han visto muy ilimitadas, tal es el caso del compatriota Fredy García, quien a pesar del cansancio y desafíos de la ruta migratoria, ha decidido buscar una vida mejor.
“Salimos familias completas en Honduras no tenemos trabajo, el gobierno se ha olvidado de nosotros, no tenemos comida, no tenemos trabajo, no podemos seguir viviendo así”, relato cansado el hondureño mientras tomaba la ruta migratoria.
Ruta que comenzó como se había anunciado en las redes sociales el 14 de enero, llegando dos días después a la frontera con Guatemala, en el que los escenarios se volvieron violentos, la tensión en el sector de Chiquimula, en donde más de cinco mil hondureños se vieron frente a las autoridades de seguridad de ese país centroamericano, quienes intentaban detener la multitud, para revisar los documentos de miles de ciudadanos.
Ante estos escenarios el procurador de los Derechos humanos de la región guatemalteca manifestó mediante un comunicado la preocupación que generan estos escenarios en ciudadanos del Triángulo Norte de la Región.
Mientras la postura del gobierno de esa nación ha sido puntual de no dejar pasar a la multitud hondureña de forma ilegal, por lo que llamo a las autoridades de Honduras a detener el flujo migratorio, sumándose de la misma manera las autoridades mexicanas, tras el envió de militares a las fronteras de ese país. Acción que ha sido calificada como de doble moral por defensores de los migrantes en tierras catrachas.
Al presente día la caravana migratoria permanece varada en las fronteras entre Honduras y Guatemala, mientras autoridades en materia de seguridad son del criterio que este fenómeno no cuenta con las medidas de resguardo.
A la fecha el Instituto Nacional de Migración, reporta más de 600 hondureños retornados de Guatemala. Por otra parte se ha dado a conocer que entre el 45 a 50 por ciento de la población que conforman las caravanas migratorias son menores de edad, en condiciones de acompañados o solos, según el dato revelado por la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia.
En los primeros días de la masiva movilización más de 20 hondureños han dado resultado positivo al Covid-19 y más de 14 presentaron acciones de denuncia ante el incumplimiento de los derechos humanos, factores que podrían estar incrementando en las próximas horas, de igual manera se ha manifestado que en los próximos días podrían estar saliendo del país más nuevas caravanas rumbo a Estados Unidos.
“Estamos llamados a reconocer en sus rostros el rostro de Cristo, hambriento, sediento, desnudo, enfermo, forastero y encarcelado, que nos interpela. Si lo reconocemos, seremos nosotros quienes le agradeceremos el haberlo conocido, amado y servido”, señaló su Santidad el Papa Francisco.