Una de las experiencias más hermosas en el núcleo familiar es la existencia de los hijos que complementan el amor entre los esposos. Pero sabemos que no hay un modelo para desempeñar la labor de padres, esto se va haciendo por inspiración o imitación de lo que se ha aprendido de los abuelos u otros familiares. Para el asesor familiar, Roger Martínez, a esta virtud se le denomina fratría, que es mantener una relación armónica entre los hermanos y tiene un componente importante de parte de los padres.
“Somos nosotros los que estamos llamados a desarrollar la fratría entre los hijos. Uno de los consejos para que esto ocurra, es compartir tiempo en familia, el que debemos de facilitar cuidando no cometer errores como el no comparar a los hijos” dijo Martínez y agrega que “si hay algo que genera desunión, molestia e incluso envidia entre hermanos, es cuando hay favoritismos.
Se deben de distribuir las tareas de la casa de manera equitativa, exigir de la misma manera”, finalizó. La especialista en piscología Kirsys Ham, expone que “Los hijos aprenden de nosotros y está en nuestras manos que tengan una relación de cariño, amor y respeto entre ellos”. Ham considera que se deben de reconocer las habilidades de cada uno por separado, que no serán iguales, pero si complementarias para las diferentes tareas.
Por su parte, la psicóloga Maribel Plata, recalca que es importante que se les preste la misma atención a los hijos por igual. “No les supervise todo el tiempo, el control sobre todo lo que hacen les frena y les hace sentir que no actúan de una forma libre y natural”. Plata expone también que se debe de fomentar la escucha activa entre ellos.
“No les interrumpan cuando hablan, si no los dejan hablar y si no respetan sus opiniones, eso es lo mismo que ellos harán a futuro”. La especialista puntualiza que incluso los enfados entre hermanos, no deben de ser reprimidos y lo que se tiene que hacer es ayudarles a entender por qué se disgustaron. La comunicación es fundamental para que los hijos establezcan relaciones fraternas entre ellos, se debe percibir un ambiente de cariño y amor en el hogar. Estas son claves para transmitir esos valores a los hijos. Como padres se debe de crear en un clima emocional saludable, para que los niños desarrollen seguridad, que haya reciprocidad y mucha disponibilidad cuando busquen a sus papás.
