La Catedral San Isidro en la Diócesis de La Ceiba, recibió a la feligresía que con gran alegría y luego de 3 años de pandemia, ha regresado a pedir al patrón de los agricultores y esta zona pastoral.
Las autoridades municipales y eclesiásticas de esta zona costera de Honduras, llegaron a escuchar el mensaje de Dios que fue trasladado de boca de Monseñor José Vicente Nácher Tatay CM, Arzobispo de Tegucigalpa, quien presidió la Eucaristía en el amor para este pueblo.
“San Isidro debe de ser un ejemplo para los trabajadores y no debemos de olvidar que debe de fortalecerse el sistema educativo, para que los jóvenes puedan tener un trabajo digno de acuerdo a una educación de calidad” recordó monseñor y también manifestó que “San Isidro debe de llamarnos a poder amar al prójimo y a los demás en una sociedad que es buena, pero que está perdida por seguir a quien no debe”.
Luego de la Misa, se procedió a un compartir entre los asistentes quienes se acercaron a Monseñor Nácher, quien con mucho afecto les impartió su bendición.